miércoles, 27 de marzo de 2013

AMA A TU CUERPO, SEA COMO SEA


Siempre voy leyendo que hemos de amarnos y aceptarnos tal y como somos. Yo me quiero mucho de verdad, pero cuando al salir de la ducha me veo en el  espejo, no me gusto nada de nada. Que quede claro que no por verme así, mi autoestima baja ni un milímetro. He escrito ver mi cuerpo y no mirarlo, que es lo que hago, pues mirarlo ya no lo miro para no ponerme de mala leche.

El cuerpo se vuele redondo, sin curvas, con la piel casi estampada de tantas manchas. De golpe te das cuenta que la cintura ha desaparecido por arte de magia, bueno por la magia de haber cumplido tantos años, que el pecho se ha vuelto flácido y caído y que el culo es todo menos duro y ya te puedes haber hartado a ponerte cremas, eso no cambia nada.

Lo único que puede cambiar tu cuerpo es pasar por la Clínica Planas y te hagan un forfeit  para cuerpo completo, desde la cabeza a los pies, que algún que otro callo también nos sale.

Después  lees eso de “ama a tu cuerpo tal y como es” y la verdad  yo lo amo pero entiendo que sea la única que lo ama.

Otra cosa de esas profundas que siempre he escuchado es “que cada edad tiene sus cosas buenas”, y yo estoy buscando hace tiempo lo bueno que tiene nuestra edad, pero aun no lo he encontrado. 

Prometo que el día que me entere lo bueno que tiene tener mi edad os lo escribo. 

1 comentario:

Lali dijo...

A muy pocas nos gusta nuestro cuerpo pero como no tenemos otro nos hemos de aguantar